lunes, 30 de agosto de 2010

¿Qué es la Publicidad?

Antes de hablar de la publicidad, yo creo que lo mejor es definirla primero, para poder entrar en su mundo. Muchas personas tienen diferentes conceptos sobre ella, pero no tienen una idea concreta sobre lo que realmente es, por eso aquí les dejo unos cuantas definiciones elaboradas por reconocidos publicistas o comunicadores.

“La publicidad es la comunicación de un mensaje destinado a influenciar la conducta de los compradores de productos o servicios, divulgados por un medio pagado y emitido con fines comerciales. También se propone crear un deseo de adquirir algo, que deberá materializarse lo antes posible en compra”, Según Álvaro Gurrea, en su libro “Introducción a la Publicidad”.

“La publicidad es un fenómeno de una complejidad tal, que obliga, a la hora de definirla, a adoptar un enfoque múltiple.” Es la definición que Antonio Ferraz Martínez colocó en su libro “El Lenguaje de la Publicidad”.

La publicidad es un conjunto de medios empleados para divulgar noticias o anunciar algún producto. Es un negocio mediante el cual el anunciante influye en los otros seres humanos al ofrecerles soluciones para sus necesidades y problemas.
La publicidad implica una forma de comunicación orientada a difundir. Se trata de un hecho comercial, social, cultural que permite estimular a los consumidores para que compren un producto o hagan uso de un servicio determinado.

Es también una comunicación pagada no personal, que por conducto de los diversos medios publicitarios hacen empresas comerciales, organizaciones no lucrativas o individuos que están identificados de alguna manera con el mensaje publicitario. Se denomina así como a los distintos sistemas de comunicación a través de los cuales se dan a conocer productos, se impone una imagen favorable de los mismos, estimulando su compra y su consumo.

En la sociedad de consumo, la publicidad constituye el instrumento adecuado para adaptar la demanda de bienes de consumo a las condiciones y exigencias del sistema productivo.

La cantidad de recursos destinados a la publicidad crece incesantemente en los países desarrollados. Y es alrededor de ella que se ha forjado una completa industria: agencias de publicidad, de marketing, empresas de relaciones públicas. Hoy en día, la publicidad es la clave de la financiación y sostenimiento de los medios de comunicación de masas en sociedades desarrolladas de mercado libre.

Término utilizado para referirse a cualquier anuncio destinado al público y cuyo objetivo es promover la venta de diversos productos. La publicidad está dirigida a grandes grupos humanos y suele recurrirse a ella cuando la venta directa de vendedor a comprador es ineficaz o de poco alcance al consumidor. Es preciso distinguir entre publicidad y otro tipo de actividades que también pretenden influir en la opinión pública, como la propaganda o las relaciones públicas.

Hay una enorme variedad de técnicas publicitarias, desde un simple anuncio en una pared hasta una campaña simultánea que emplea periódicos, revistas, televisión, radio, folletos distribuidos por correo y otros medios de comunicación de masas. Desde sus inicios en el mundo antiguo, la publicidad ha evolucionado hasta convertirse en una enorme industria. Tan sólo en Estados Unidos, a finales de la década de 1980, se gastó en un año en torno a 120.000 millones de dólares en publicidad. La publicidad en Estados Unidos es la primera a escala mundial, no sólo por su volumen, sino a complejidad en lo relativo a organización y a técnicas publicitarias. Ya que muchos de los métodos de este país han sido copiados en otros países. La publicidad de ahora desempeña un papel muy importante en la civilización industrial urbana, ya que condiciona para bien y para mal todos los aspectos de la vida cotidiana. Desde la década de 1960 la publicidad se ha utilizado cada vez más para fomentar el bienestar. Las campañas a favor de la salud y contra el consumo de bebidas alcohólicas demuestran que la industria publicitaria puede defender objetivos como estos.

La publicidad puede tener un alcance local, nacional o internacional. Los precios de una campaña publicitaria dependerán de cómo esta se implanta en la población. También variarán en función de lo que se anuncia ya sea ocio, cuestiones legales, políticas, financieras, temas religiosos o anuncios destinados a recoger donaciones para financiar actividades caritativas o humanitarias.

Una técnica publicitaria, cada vez más frecuente, es tal que consiste en presentar campañas publicitarias conjuntas entre el productor y el vendedor. A veces, cuando se realizan campañas a escala nacional, varios empresarios pueden compartir un mismo anuncio.

La publicidad como institución social, ejerce un protagonismo en nuestros días sobre todo en los países más desarrollados, esto se debe a que, como resultado de profundas transformaciones socioeconómicas, se ha desembocado en una sociedad muy tecnificada con capacidad para producir y consumir bienes en grandes cantidades. Es la llamada “sociedad de consumo”. Para fomentar el consumo, la publicidad persigue llegar a todos los rincones posibles a través de los medios de comunicación social o conocidos comúnmente como “mass media” tales como la prensa, carteles, radio, cine y televisión.

La publicidad forma parte del “marketing” o mercadotecnia. Se diferencia de otras técnicas comerciales por la difusión de sus mensajes a través de los medios de comunicación social. Estos medios o canales son de sentido unidireccional, esto nos quiere decir que el mensaje va del emisor al receptor sin que este último pueda responder en el acto. La única respuesta que buscan los anuncios es la compra de un producto o de un servicio por parte del público al que se dirigen.

Esta finalidad mercantil distingue la publicidad comercial de la comúnmente llamada publicidad institucional. Así mismo conviene que se separe a la publicidad de las “Relaciones Públicas” de instituciones de toda índole.

La Publicidad se ha convertido en una industria cultural. Como los demás mensajes canalizados a través de los medios de comunicación social, también los publicitarios contribuyen a la denominada “cultura de masas”. Esta es el resultado de la acción de esos poderosísimos medios de difusión: gracias a ellos, los mensajes llegan a un público muy amplio, disperso y heterogéneo.

De esta manera también se integran los estereotipos o imágenes de alguna marca, promovidos por la publicidad, en la mentalidad del hombre contemporáneo. Estos consisten en la serie de representaciones con que se quiere individualizar y dar personalidad propia a los productos o bienes anunciados.

Con este fin la publicidad se apoya más en los valores de uso objetivo, que en los valores de carácter simbólico asociados de forma estable a los productos, éstos se convierten así en signos sociales de distinción, éxito, juventud, modernidad, atracción erótica, entre otros. En este sentido, se puede decir que la publicidad no sólo difunde, sino que también conforma los valores sociales de la ideología de nuestro tiempo.

En muchas ocasiones, lo que realmente quiere adquirir el comprador son esos valores asociados o connotativos en la publicidad, más que el objeto en sí. Esto explica el fenómeno actual de que las marcas ya no señalen o identifiquen únicamente a sus productos sino también a sus consumidores, que son los que luego formaran un grupo connotado con unas determinadas cualidades que son signos sociales.


3 comentarios:

  1. me fue de gran ayuda la definición de publicidad!
    pdt: me encanta la foto del gato!jejeje!

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  2. Sí es importante definir primero lo que es la publicidad para poder hablar de ella.

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